La provincia de Alicante nos ofrece un gran abanico de rutas de senderismo para realizar. Es por ello que al empezar el itinerario exista la posibilidad de aparición de ampollas, hinchazón o dolor en los pies, y solo nos acordamos de ellos cuando ya han aparecido las dolencias. Por ello, desde DELAMO Podología te damos 5 consejos para hacer senderismo y cuidar nuestros pies.

1. Elige un calzado adecuado

Escoger el calzado será una de las decisiones más importantes a la hora de hacer la ruta. 

Es primordial que no estrenes las botas porque hay una alta probabilidad de que aparezcan ampollas. Lleva un calzado que se amolde a las características de la ruta, lo que evitará rozaduras o futuros dolores.

Nuestra recomendación es que encuentres un punto intermedio, en el que las botas no estén muy ajustadas, porque los pies se hinchan con la actividad física, y en el que no sean demasiado anchas porque aparecerían rozaduras.

2. Mantén los pies secos

El primer paso es llevar unos calcetines ajustados que no creen pliegues, ya que nos podrían rozar, y que absorban la humedad.

Asimismo, en DELAMO Podología te recomendamos llevar calcetines de repuesto para cambiarlos durante los descansos de la ruta. Debido al esfuerzo nuestros pies sudan y con la piel húmeda es más probable que salgan ampollas.

3. Masajea para recuperar

Tras realizar la actividad en la montaña sentiremos fatiga y pesadez en nuestras piernas y pies, por lo que masajearlos con un gel frío específico aliviará esa sensación. El momento idóneo para hacerlo es después de acabar la actividad, cuando aún nuestro cuerpo está caliente.

4. Hidrata bien tus pies

Después de exponer nuestros pies a un esfuerzo como el senderismo, es fundamental que los hidratemos para evitar la sequedad, además que también acortará el proceso de recuperación.

Sin embargo, es recomendable hidratarlos siempre en nuestro día a día, no solo tras realizar una actividad física.

5. Sé precavido

Es muy común que tengamos cualquier tipo de dolencia en nuestros pies, como uñas encarnadas, callos, rozaduras… que pueden provocar dolor cuando sometemos nuestros pies a una actividad.

No obstante, te animamos a ir a tu podólogo de confianza para tratar tu problema y así evitar futuras dolencias que puedan aparecer o empeorar cuando hagas tu ruta favorita.

En DELAMO Podología nos preocupamos por el bienestar de nuestros pacientes. Por ello, si tienes cualquier pregunta contacta con nosotros a través de las redes sociales o por teléfono.